domingo, 5 de julio de 2009

Sobre la violencia en las escuelas(1º parte)

A diario escuchamos de los diversos episodios de violencia ocurridos en la escuela, en la calle, en el deporte, en el propio hogar.
En este caso voy a referirme puntualmente a la violencia en la escuela, tratando de que podamos reflexionar y pensar un poco más de cerca esta problemática. Sin dejar de tener en cuenta la singularidad de cada caso e institución. La intención es abrir un poco la mirada sobre esto ¿de qué hablamos cuando decimos violencia en la escuela?

La violencia se relaciona con una fuerza impetuosa que ejerce una coacción sobre algo- personas, instituciones, grupos, realizaciones de las personas. Alude a las relaciones entre sujetos o entre grupos e instituciones que están caracterizadas por esta fuerza de coacción de uno sobre otros. La violencia intenta provocar un cambio en el otro, pero a partir de una imposición. Referirse a violencia en la escuela, implica hablar de distintas formas de violencias:
-violencia contra la escuela, aquí la escuela es objeto de violencia por parte de la sociedad, de grupos, de instituciones, del campo económico.
-violencia que se genera dentro de la escuela.
Además se puede hablar de violencia objetiva y subjetiva. La primera alude a las formas claramente visibles, que dan lugar a un tratamiento desde lo jurídico, desde lo legal, desde lo delictivo, y es vista como la consumación en actos concretos. La segunda, la violencia subjetiva, es actitudinal, puede ser constitutiva de rasgos de personalidad, que pueden estar o no favorecidos por el medio en el cual uno vive.
Convivir en las escuelas, es sumamente complejo. No hay convivencia exenta de conflictos. Estos últimos son parte estructural de la convivencia humana, y por tanto, esperables y previsibles.
En el contexto social y cultural en que vivimos, la conflictividad se incrementa y desborda la capacidad de contención de las instituciones.
Atender a esta problemática, implica el desarrollo de estrategias que favorezcan una convivencia escolar democrática, que permitan comprender el conflicto como inherente a las relaciones entre personas y a su resolución pacífica como objetivo primordial de todos los integrantes de la comunidad educativa, es parte importante del mejoramiento de la calidad educativa, en tanto promueve condiciones para el logro de mejores aprendizajes.
La disciplina escolar se ha venido practicando como método para accionar sobre la conducta de los alumnos cuando éste rompe con determinadas pautas consideradas como correctas dentro una institución determinada.
Me pregunto que grado de eficacia tiene hoy en día esta forma de tratamiento de los conflictos que se generan en la escuela.
¿La disciplina resulta tan efectiva hoy? ¿Se necesitarían nuevas formas de abordar el aprendizaje/ educación?
Continuará

Ps. Valeria Pelusso





2 comentarios:

  1. Valeria, si reducimos la violencia a objetiva y subjetiva, resultará muy dificil prevenirla tempranamente y enfrentarla eficazmente. Hoy algunos preferimos hablar de violencias directas (visibles) e indirectas (muy poco visibles o invisibles)Luego también hay que analizar lo que distintos investigadores llaman violencias blandas y duras.
    Son distintas miradas, pero para actuar nos resultan mucho más prácticas.
    A.C.S.
    Cátedra UNESCO Juventud, Educación y Sociedad.
    (UCB, Brasil)

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  2. En principio muchas gracias por el comentario, mi artículo apunta a que podamos pensar, y compartir distintas miradas sobre esta problemática tan preocupante hoy en día.
    Me interesaría que podamos intercambiar información sobre los lineamientos teóricos que utilizan en la práctica,como así también las situaciones más frecuentes de conflicto que se presentan allí, sin dejar de tener presente que el contexto social y económico donde se sitúe la población en que pensemos tiene su determinación, así como la singularidad de cada integrante de la misma.
    Saludos
    Psicóloga Valeria Pelusso

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